La contertuliana más famosa de España no faltó a sus obligaciones ni el día de su cumpleaños. El cumpleaños de Belén coincide con la patrona de Madrid pero ese festivo tampoco le sirvió de excusa a la joven para no ir a su programa y soplar las velas en plató.Belén celebró su cumpleaños por todo lo alto rodeada de sus compañeros. Ese día volvió a ser la protagonista del programa ya que todos quisieron felicitarle y obsequiarle con regalos, tanto el público como los colaboradores.
Estos fueron quienes le regalaron unos zapatos, los mismo que ella regaló días entes a la Princesa Letizia. Ahora las posibilidades de que vuelvan a coincidir con la misma ropa o complementos aumentan. Belén agradeció el detalle y Jorge Javier no dudó en probárselos.
Pero Belén también se acordó de todos sus compañeros y para ellos llevó dos bandejas grandes de pasteles. Cargada la vimos salir de su casa con los dulces, comprados en una buena pastelería de su nuevo barrio y por los que pagó casi cuarenta euros. Ella no puede comer dulces porqué es diabética pero la pastelería si tuvo un detalle con su hija y junto a los pasteles llegó un paquetito donde se podía leer ‘Andrea’.
El gran misterio: ¿Qué le regaló Fran?
Y también llegó cargada a casa. Belén regresó acompañada de su marido con todos los regalos. Entre ellos, un gran oso de peluche que le dio una seguidora durante el programa. También recibió unos dulces, un anillo y los ya famosos zapatos de su línea. Lo que no quiso desvelar es qué le había regalado su marido, quien aún se esfuerza para que Belén olvide todo lo vivido estos últimos meses.
Este ha sido un cumpleaños tranquilo. Fran estuvo a su lado hasta que ella se marchó a trabajar y Andrea pasó el día en el colegio. Belén siempre dice que es una mujer muy tradicional y tranquila por lo que este día siguió con sus rutinas, trabajo y familia. A sus treinta y siete años, Belén empieza a replantearse su vida.
Hace pocas semanas, la joven confesó que pronto dejará la televisión ya que está sometida a mucha presión. Las cámaras ocultas y las aireadas infidelidades de su marido han hecho mella en la joven, quien ya ve difícil poder confiar en alguien. Belén dice que lo tiene todo muy meditado y que en breve podría desaparecer de los medios. Muchos, sin embargo, no se lo terminan de creer.
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